MARCOS DOMINICI BORGES.-
Desde aquel dos de junio de 1996, cuando en un histórico acto celebrado en el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto, las dos figuras políticas más importantes de la historia dominicana reciente; el profesor Juan Bosch y el doctor Joaquín Balaguer, señalaban al joven abogado Leonel Fernández como el dominicano que tenía las condiciones para conducir los destinos de la República Dominicana de cara al siglo XXI, por senderos de progreso, bienestar y desarrollo, el país encendió sus motores para iniciar su camino hacia el franco desarrollo.
Se dieron cuenta que como en “El principito”, de Antoine de Saint-Exupéry: “Lo esencial es invisible a los ojos”.
¿Será que en el ocaso de sus días, al pasar la antorcha a Leonel Fernández, estos dos titanes de la política dominicana habrían decidido ser recordados por las siguientes generaciones como aquellos que trazaron el verdadero camino hacia la transformación y la modernidad de la República Dominicana?
Parece que los viejos zorros de la política nacional no se equivocaron. Estaban en lo cierto, Bosch y Balaguer habrían visto en Leonel, a ese patriota capaz de sentir el olor de la desesperanza del pueblo dominicano para transformarla en un futuro de esperanza, bienestar y progreso.
Don Juan y Elito vieron en Leonel a un dominicano digno, humilde, ilustre, poseedor del temple y la firmeza para echar a andar un proyecto de nación que integre a todos los dominicanos y dominicanas para juntos trazar un nuevo futuro.
Con el devenir de los años nuestra historia más reciente ha confirmado que la República Dominicana de 1996, no es la República Dominicana en que vivimos hoy.
Efectivamente, desde la asunción al Poder, del doctor Leonel Fernández (1996-2000); (2004-20012), el país ha experimentado una innegable transformación positiva, tanto en el desarrollo de su infraestructura como en el fortalecimiento de las instituciones del Estado.
Bosch y Balaguer, habrían visto en Leonel a ese patriota capaz de sentir el olor de la desesperanza del pueblo dominicano para transformarla en un futuro de esperanza, bienestar y progreso.